Señorita, puede traerme...

Entrevistamos hace unos días a nuestra enfermera de guardia en la terracita, Tarei. Esta nuestra personal sanitaria es una jovencita, risueña, amable, amante de la música y la danza que un día de verano después de dormir la siesta tras una ajetreada tarde en su mini piscina de plástico tuvo un sueño: sería enfermera. Pasaron, los días, los años y finalmente obtuvo su tan ansiada mascarilla y tensiómetro a pilas. ¡Sueño conseguido!

Giró a la derecha y entró a la habitación de su primer paciente, la 246. El hombre con la muerte reflejada en su rostro yacía en la cama, al oírla entrar, volvió ligeramente la cabeza hacia ella ofreciéndole la sonrisa del agradecimiento y expiró hacia el silencio de la noche eterna.

Os dejo con Ta, ese tipo de personas maravillosas de las que el mundo no anda sobrado, no se la pierdan.

¿Cómo fue tu primer día como enfermera?
Mi primer día de enfermera fue un cúmulo de sensaciones, pero lo que más recuerdo son los nervios que sentí ante la gran responsabilidad que se me venía encima y que iba a ser una constante en mi día a día.
Llegué una hora antes de mi hora de entrada, quería familiarizarme con la planta y con los compañeros, y salí una hora más tarde pues, no sé por qué, pero a mí se me multiplicaban las cosas que hacer!! Un par de días después ya cogí el ritmo de trabajo y todo se normalizó.

¿Cuáles son tus funciones?
Para enumerar las funciones de enfermería convendría primero distinguir los dos grandes grupos de atención de la misma: atención primaria (en centros de salud), donde las funciones principales se resumen a atender consultas a demanda y/o programadas (control de constantes vitales, curas programadas, vacunas, pequeñas urgencias, atención domiciliaria, etc.) y atención especializada (hospitales, mi pasión y espero que mi futuro) que se basa en el cuidado del paciente internado y grandes urgencias (control de constantes, administración de tratamientos, curas....). Después también existen otros grupos como enfermería de empresa, preventiva, investigación...

¿Cómo es tu relación con los pacientes y qué nos cuentas de tu trato con ellos en el día a día?

Lo que siempre quiero dejar claro es que nuestra relación es profesional única y exclusivamente. Eso no quita que intente siempre tener una relación de persona a persona, escuchando y atendiendo todas inquietudes y necesidades. Principalmente pretendo ofrecerles el trato que yo quisiera para un ser querido o para mí. Muchas veces una palabra o gesto amable de nuestra parte hace su estancia un poco más llevadera que, tecnicismos médicos aparte, es de lo que se trata nuestro trabajo. Adoro el trato que el paciente y siempre procuro dedicarles el máximo tiempo posible a ellos.

Hoy por hoy, ¿cuál es la situación en la que se encuentra la profesión de Enfermería?

En la actualidad, no encontramos en un momento de transición que nos llevará a una redefinición de competencias, logrando un trabajo más cooperativo y funcional para con el resto del equipo. En cuanto a la situación en el mercado laboral, depende siempre del tiempo que haya transcurrido desde la diplomatura, siendo muy inestable al principio (cubriendo bajas, vacaciones, etc...) aumentando su continuidad cuanto mayor sea el tiempo trabajado.

¿Podrías indicarnos los principales cambios que ha experimentado tu profesión en estos últimos años?

Lo más destacable en los últimos años es, sin duda, la unificación de las titulaciones: enfermera (título oficial desde 1915), matrona y practicante, englobados en ATS (Ayudante Técnico Sanitario) en 1935, pasando finalmente a constituir una carrera universitaria en 1977 (Diplomatura Universitaria en Enfermería, DUE, nuestra denominación actual).

¿Hay diferencias entre los profesionales de Enfermería en el mundo?

Sí, centradas principalmente en el sistema trabajo que, en países como Francia o Inglaterra, es menos técnico (con funciones más interactivas con el paciente como el aseo, por ejemplo, que aquí sería función del/ de la auxiliar). Conviene destacar también que en dichos países perciben una remuneración sustancialmente mayor que en España.


¿Cuáles serán los principales problemas que se le plantearán a la profesión de Enfermería en el futuro?

Indudablemente, la falta de personal que sufrirá en las próximas décadas debido al envejecimiento de la población. Las consecuencias del "baby boom" de después de la Segunda Guerra Mundial serán visibles en unos 10-15 años, lo cual generará una demanda sin precedentes para nosotros que, posiblemente, desestabilice el correcto funcionamiento del método de contratación.


¿Cuáles son los principales retos que la Enfermería habrá de resolver para ampliar su labor profesional?

Actualmente nos encontramos ante el inicio de una nueva etapa en la enfermería con el nuevo sistema universitario. El proyecto consiste en convertir la actual diplomatura en una licenciatura que nos otorgue mayores capacidades docentes, en investigación y en autogestión con su consiguiente reconocimiento social.

Según tu percepción, ¿los principales problemas o inconvenientes con los que se topan las/los enfermeras/os a la hora de realizar su trabajo serían…?

Personalmente opino que el principal problema, en cualquier profesión, es la contradicción y descoordinación entre los miembros del grupo de trabajo: la desautorización por parte de los médicos es muy frecuente y contraproducente a la hora de llevar a cabo nuestro trabajo, además de la inseguridad que causan en el paciente y familiares nuestras funciones, lo que anula por completo nuestra credibilidad como profesionales ante ellos.


¿Existe formación suficiente en las Escuelas Universitarias de Enfermería como para que un/a recién diplomado/a entre a formar parte de un servicio sanitario?

Sí y no. El principal problema en la formación de mi profesión es la multitud de campos disciplinarios que existen en ella. Las escuelas se centran sobre todo en formarnos en las funciones básicas de enfermería pero cada hospital, cada planta, tiene sus propios protocolos de trabajo y funciones específicas que, en tres años, ahora cuatro, son imposibles de conocer. Una unificación de los métodos de trabajo sería muy productiva y facilitaría nuestro trabajo.

¿Se precisa un perfil específico o se necesitan unas características (aptitudes y actitudes) determinadas para trabajar en estos servicios? ¿Cuáles son?

Creo que lo principal en este tipo de profesión es la vocación: si ejerces por inercia lo más probable es que tu falta de interés se trasmita a los pacientes. También pienso que la empatía es muy importante para llevar a cabo un trato consecuente y personalizado pero sin llegar a interiorizar demasiado la situación del paciente pues eso podría causar efectos perjudiciales en nuestra vida laboral y personal.


¿Qué te gustaría cambiar, si fuese posible, en las unidades docentes acreditadas para formar especialistas?

Su forma de acceso y, sobre todo, su disponibilidad pues, por ejemplo, en la comunidad en la que resido, sólo disponemos de dos posibles especialidades a elegir lo que coarta demasiado nuestras posibilidades.


¿Qué logros han conseguido las enfermeras de… en la última década (o los últimos tiempos)?

Como dije anteriormente, el mayor logro que se está consiguiendo en la actualidad es en cambio de diplomatura a licenciatura (aunque sea a nivel nacional) de nuestra carrera. Las nuevas competencias adquiridas serán un paso enorme para nuestra evolución profesional estancada durante años.


¿Hacen falta un mayor número de enfermeros/as en los hospitales?

Sí, estamos expuestos a una carga de trabajo mayor a la recomendable en muchas ocasiones lo que pone en riesgo la validez de nuestros cuidados y aumenta cuantiosamente los riesgos laborales.

¿Qué sucede en cuánto al reconocimiento de la enfermería?

El principal escollo en el reconocimiento de nuestra labor profesional está en la concepción tradicional (sirvienta, camarera...) de nuestra profesión por parte de la sociedad. Un ejemplo muy gráfico, y que personalmente odio, es el "eh! chica" que tenemos que sufrir en demasiadas ocasiones. Entre el resto de profesionales del equipo de trabajo estamos consiguiendo que nuestro lugar en el mismo sea respetado, aunque no siempre se consiga.

Actualmente, ¿Qué tipo de salidas laborales tiene esta profesión?

La mejor opción siempre es la sanidad pública y, debido a la gran demanda existente, es de fácil acceso hoy en día. Su inconveniente es que la continuidad larga en cada unidad es muy difícil. La sanidad privada es una opción segura de trabajo, pero sus condiciones son infinitamente peor es que en la anterior.


¿Añadirías alguna cuestión que no te haya preguntado y consideres de interés?

Pues no, porque ya me llevó lo suyo contestar a las que hay y, aún así, dejé una (por eso de que si está mal descuenta, que estoy escaldada de las opas...ejejejje). Saludos!!!


Gracias, Tarei, por compartir tus experiencias con nosotros. Ha sido un auténtico placer leerte.

Recuerden hay dos formas de no estar enfermo, la primera es no estarlo. La segunda por supuesto que no te lo digan. Sean felices.