domingo, 3 de enero de 2010

Camina, ama, lucha y olvida hasta diciembre


Son las tres de la madrugada, principios de Enero. Aquí hace frío, pero me siento bien. He oído que regresaste. La última vez que nos vimos volvías de París. Decidiste cambiar de vida, no sé si lo conseguiste, jamás pregunté por ti aunque sé que nuevamente cada diciembre me buscas en las respuestas de nuestros amigos.  Confieso que cada fin de año espero inquieta la confidencia de  Paco contándome, con esa sonrisa suya tan irónica, que aún añoras  nuestros buenos momentos de tantas navidades juntos, que continúas preguntándote en qué momento nos perdimos dejando de abrazarnos con palabras.
Hoy como cada comienzo de año  me emborracho de esta tosca, fría, silenciosa soledad. Aquí y allí, el aroma distante de tu tabaco de artista me atrapa de cuando en vez en este tu reinado de principios de año. Y es que de vez en cuando al mirar ese rincón vacío se deja caer la más terrible de las sombras; ¿Por qué debe llover en esta piel de olvido si ya no conservo  más que un paisaje sin batalla?
Escóndete ruidoso luto aunque tengas los pies fríos.
Qué sentido tiene emborronar de palabras  el  silencio que esconde su pasión  al delirante susurro, quizá únicamente contenga sentidos disfrazados de simulacros. Pensé que no había nada que hacer por eso ni tan siquiera lo intenté.
 Los días pasan sin definir.
 Nos vemos en diciembre.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenas tardes amigas, sigo sin poder comentar pero me ha encantado la entradade hoy, creo que me identifico no con lo vivido pero si con el sentimiento de lucha por seguir respirando.
Diciembre siempre ha sido para mi el mes de mirar hacia atrás y hacer recuento del año y aunque intento no hacerlo mi mente me juega la mala pasada de no solo hacerlo del año sino de mi vida entera la vida que he decidido tener la que me he creado paso a paso yo solita y mis circunstancias.
Pasan los días y miro el Móvil se que tengo que felicitar y voy pasando muchos nombres de amigos, familiares, conocidos que han pasado por mi vida y mi mente vuelve a jugar conmigo y me hace recordar los momentos vividos con ellos analizo en que momento me aparté yo cuando deje de valorar una llamada una visita de ellos cuando me empezó a dar igual todo quisiera preguntarles como hicieron ellos para seguir para no perder la fuerza la ilusión del seguir viviendo y no existiendo.
Diciembre con sus días quizás me atreva a pedir un elixir, un elixir para olvidar que tengo que cambiar de forma de pensar.

Mar

MP dijo...

Gracias, Mar por comentar. Estoy encantada de tenerte de vuelta entre estas letrillas. Se te echaba de menos, amiga. Diciembre es así de puñetero!!! Y éste encima al final se despidió con una luna azul tela y yo que soy un poco lunática bufffffffff.

Anónimo dijo...

Que raro se me hace leer esas letras de Mar. A pesar de todo, y aunque no me creais, os tengo muuuucho cariño. Os echo de menos. Quizás la distancia nos separe y nuestra forma de sentir "el mundo" pero os llevo en mi corazón. Como siempre ... GRACIAS por todo lo que hemos compartido. Besos. Sara.